lunes, 19 de octubre de 2009





Tome este post prestado desde el blog de Víctor Manuel,
http://los33escalonesdelconocimientomasonico.blogspot.com Porque me parece sumamente interesante y de una actualidad rabiosa en cualquier momento.
Espero que sea de su agrado.




MARIO MORENO
"CANTINFLAS"


FENIX NEWS presenta este discurso, pronunciado hace 40 años por Cantinflas, supuestamente ante la Organización de Naciones Unidas, en una película en la cual él hacía el papel de embajador.

El discurso tiene más de cuarenta años pero, sin quitarle una coma, podría repetirse en cualquier foro político con absoluta y vigente pertinencia. Este fue el mismo filósofo de aquella célebre y crucial pregunta, formulada justo antes de sentarse a jugar dominó: "¿Vamos a jugar como caballeros ó como lo que somos?" Este es un excelente homenaje, a un hombre y aun masón sensible y lleno de sano humor que nos legó México, a todos sus hermanos indoamericanos...
DISCURSO

“Me ha tocado en suerte ser último orador, cosa que me alegra mucho porque, como quien dice, así me los agarro cansados. Sin embargo, sé que a pesar de la insignificancia de mi país que no tiene poderío militar, ni político, ni económico ni mucho menos atómico, todos ustedes esperan con interés mis palabras ya que de mi voto depende el triunfo de los Verdes o de los Colorados.


Señores Representantes: Estamos pasando un momento crucial en que la humanidad se enfrenta a la misma humanidad. Estamos viviendo un momento histórico en que el hombre científica e intelectualmente es un gigante, pero moralmente es un pigmeo. La opinión mundial está tan profundame nte dividida en dos bandos aparentemente irreconciliables, que dado el singular caso, que queda en solo un voto. El voto de un país débil y pequeño pueda hacer que la balanza se cargue de un lado o se cargue de otro lado. Estamos, como quien dice, ante una gran báscula: por un platillo ocupado por los Verdes y con otro platillo ocupado por los Colorados. Y ahora llego yo, que soy de peso pluma como quien dice, y según donde yo me coloque, de ese lado seguirá la balanza. ¡Háganme el favor!… ¿No creen ustedes que es mucha responsabilidad para un solo ciudadano? No considero justo que la mitad de la humanidad, sea la que fuere, quede condenada a vivir bajo un régimen político y económico que no es de su agrado, solamente porque un frívolo embajador haya votado, o lo hayan hecho votar, en un sentido o en otro.


El que les habla, su amigo… yo… no votaré por ninguno de los dos bandos (voces de protesta). Y yo no votaré por ninguno de los dos bandos debido a tres razones: Primera, porque, repito que no se sería justo que el sólo voto de un representante, que a lo mejor está enfermo del hígado, decidiera el destino de cien naciones; Segunda, estoy convencido de que los procedimientos, repito, recalco, los procedimientos de los Colorados son desastrosos (voces de protesta de parte de los Colorados); ¡y Tercera!… porque los procedimientos de los Verdes tampoco son de lo más bondadoso que digamos (ahora protestan los Verdes). Y si no se callan ya yo no sigo, y se van a quedar con la sensación de saber lo que tenía que decirles.


Insisto que hablo de procedimientos y no de ideas ni de doctrinas. Para mí todas las ideas son respetables aunque sean “ideítas” o “ideotas” aunque no esté de acuerdo con ellas. Lo que piense ese señor, o ese otro señor, o ese señor (señala), o ese de allá de bigotico que no piensa nada porque ya se nos durmió, eso no impide que todos nosotros seamos muy buenos amigos. Todos creemos que nuestra manera de ser, nuestra manera de vivir, nuestra manera de pensar y hasta nuestro modito de andar son los mejores; y el chaleco se lo tratamos de imponérselo a los demás y si no lo aceptan decimos que son unos tales y unos cuales y al ratito andamos a la greña. ¿Ustedes creen que eso está bien? Tan fácil que sería la existencia si tan sólo respetásemos el modo de vivir de cada quien. Hace cien años ya lo dijo una de las figuras más humildes pero más grandes de nuestro continente: “El respeto al derecho ajeno es la paz” (aplausos). Así me gusta… no que me aplaudan, pero sí que reconozcan la sinceridad de mis palabras.


Yo estoy de acuerdo con todo lo que dijo el representante de Salchichonia (alusión a Alemania) con humildad, con humildad de albañiles no agremiados debemos de luchar por derribar la barda que nos separa, la barda de la incomprensión, la barda de la mutua desconfianza, la barda del odio, el día que lo logremos podemos decir que nos volamos la barda (risas). Pero no la barda de las ideas, ¡eso no!, ¡nunca!, el día que pensemos igual y actuemos igual dejaremos de ser hombres para convertirnos en máquinas, en autómatas.


Este es el grave error de los Colorados, el querer imponer por la fuerza sus ideas y su sistema político y económico, hablan de libertades humanas, pero yo les pregunto: ¿existen esas libertades en sus propios países? Dicen defender los Derechos del Proletariado pero sus propios obreros no tienen siquiera el derecho elemental de la huelga, hablan de la cultura universal al alcance de las masas pero encarcelan a sus escritores porque se atreven a decir la verdad, hablan de la lib re determinación de los pueblos y sin embargo hace años que oprimen una serie de naciones sin permitirle que se den la forma de gobierno que más les convenga. ¿Cómo podemos votar por un sistema que habla de dignidad y acto seguido atropella lo más sagrado de la dignidad humana que es la libertad de conciencia eliminando o pretendiendo eliminar a Dios por decreto? No, señores representantes, yo no puedo estar con los Colorados, o mejor dicho con su modo de actuar; respeto su modo de pensar, allá ellos, pero no puedo dar mi voto para que su sistema se implante por la fuerza en todos los países de la tierra (voces de protesta). ¡El que quiera ser Colorado que lo sea, pero que no pretenda teñir a los demás! —Los Colorados se levantan para salir de la Asamblea —.


¡Un momento jóvenes!, ¿pero por qué tan sensitivos? Pero si no aguantan nada, no, pero si no he terminado, tomen asiento. Ya sé que es costumbre de ustedes abandonar estas reuniones en cuanto oyen algo que no es de su agrado; pero no he terminado, tomen asiento, no sean precipitosos… todavía tengo que decir algo de los Verdes, ¿no les es gustaría escucharlo? Siéntese (va y toma agua y hace gárgaras, pero se da cuenta que es Vodka).


Y ahora, mis queridos colegas Verdes, ¿ustedes qué dijeron?: “Ya votó por nosotros”, ¿no?, pues no, jóvenes, y no votaré por ustedes porque ustedes también tienen mucha culpa de lo que pasa en el mundo, ustedes también son medio soberbios, como que si el mundo fueran ustedes y los demás tienen una importancia muy relativa, y aunque hablan de paz, de democracia y de cosas muy bonitas, a veces también pretenden imponer su voluntad por la fuerza, por la fuerza del dinero. Yo estoy de acuerdo con ustedes en que debemos luchar por el bien colectivo e individual, en combatir la miseria y resolver los tremendos problemas de la vivienda, del vestido y del sustento. Pero en lo que no estoy de acuerdo con ustedes es la forma que ustedes pretenden resolver esos problemas, ustedes también han sucumbido ante el materialismo, se han olvidado de los más bellos valores del espíritu pensando sólo en el negocio, poco a poco se han ido convirtiendo en los acreedores de la humanidad y por eso la humanidad los ve con desconfianza.


El día de la inauguración de la Asamblea, el señor embajador de Lobaronia dijo que el remedio para todos nuestros males estaba en tener automóviles, refrigeradores, aparatos de televisión; ju… y yo me pregunto: ¿para qué queremos automóviles si todavía andamos descalzos?, ¿para qué queremos refrigeradores si no tenemos alimentos que meter dentro de ellos?, ¿para qué queremos tanques y armamentos si no tenemos suficientes escuelas para nuestros hijos? (aplausos).


Debemos de pugnar para que el hombre piense en la paz, pero no solamente impulsado por su instinto d e conservación, sino fundamentalmente por el deber que tiene de superarse y de hacer del mundo una morada de paz y de tranquilidad cada vez más digna de la especie humana y de sus altos destinos. Pero esta aspiración no será posible sino hay abundancia para todos, bienestar común, felicidad colectiva y justicia social. Es verdad que está en manos de ustedes, de los países poderosos de la tierra, ¡Verdes y Colorados!, el ayudarnos a nosotros los débiles, pero no con dádivas ni con préstamos, ni con alianzas militares.


Ayúdennos pagando un precio más justo, más equitativo por nuestras materias primas, ayúdennos compartiendo con nosotros sus notables adelantos en la ciencia, en la técnica… pero no para fabricar bombas sino para acabar con el hambre y con la miseria (aplausos). Ayúdennos respetando nuestras costumbres, nuestras costumbres, nuestra dignidad como seres humanos y nuestra personalidad como naciones por pequeños y débiles que seamos; practiquen la tolerancia y la verdadera fraternidad que nosotros sabremos corresponderles, pero dejen ya de tratarnos como simples peones de ajedrez en el tablero de la política internacional. Reconózcannos como lo que somos, no solamente como clientes o como ratones de laboratorios, sino como seremos humanos que sentimos, que sufrimos, que lloramos.


Señores representantes, hay otra razón más por la que no puedo dar mi voto: hace exactamente veinticuatro horas que presenté mi renuncia como embajador de mi país, espero me sea aceptada. Consecuentemente no les he hablado a ustedes como Excelencia sino como un simple ciudadano, como un hombre libre, como un hombre cualquiera pero que, sin e mbargo, cree interpretar el máximo anhelo de todos los hombres de la tierra, el anhelo de vivir en paz, el anhelo de ser libre, el anhelo delegar a nuestros hijos y a los hijos de nuestros hijos un mundo mejor en el que reine la buena voluntad y la concordia. Y qué fácil sería, señores, lograr ese mundo mejor en que todos los hombres blancos, negros, amarillos y cobrizos, ricos y pobres pudiésemos vivir como hermanos. Si no fuéramos tan ciegos, tan obcecados, tan orgullosos, si tan sólo rigiéramos nuestras vidas por las sublimes palabras, que hace dos mil años, dijo aquel humilde carpintero de Galilea, sencillo, descalzo, sin frac ni condecoraciones: “Amaos… amaos los unos a los otros”, pero desgraciadamente ustedes entendieron mal, confundieron los términos, ¿y qué es lo que han hecho?, ¿qué es lo que hacen?: “Armaos los unos contra los otros”. … He dicho…”.

sábado, 20 de junio de 2009




DOLOR...

Mal día fue ayer, pues entre tantos muertos, dos personas murieron de manera diferente en la forma y en el fondo.
Por un lado Don Vicente Ferrer, un hombre bueno, un hombre ejemplo de solidaridad, humano que creía fehacientemente en lo que hacía, una vida dedicada a ayudar a los mas necesitados, espíritu libre que luchaba contra la pobreza, la injusticia, la ignorancia y el dolor de los demás.

Descanse en paz, Don Vicente Ferrer, y ojala nunca se extinga la llama que usted prendió.





Y RABIA.

Por otro lado, Don Eduardo Puelles, inspector de policía, destinado en Arrigorriaga, que fue muerto a traición, de forma inhumana por una banda de asesinos, “ETA” que disfrutan con lo que hacen… ¡matar!
Ojala algún día, los políticos se den cuenta de que la gente de bien, la gente de a pie, solicita la máxima pena para estos asesinos.
Yo soy aun más radical, yo impondría para ellos la pena de muerte, sin ambages. Creo sinceramente que todos aquellos que se llaman o de definen a si mismos como demócratas y pacifistas, solicitarían lo mismo si les hubiese tocado a ellos de cerca, a un padre… un hijo… un hermano.
Claro, son lo que cuando le sucede al vecino de enfrente, suelen decir…”que pena, que mala suerte”
¡Pero, no es así!
Descanse en Paz, si es posible, Don Eduardo Puelles.

viernes, 19 de junio de 2009




LEY DEL ABORTO

Creo que ni todo es blanco, ni todo es negro, que siempre hay entre ellos varios colores que se pueden ver.
Esto viene a cuento por la tan cuestionada ley del aborto, no seré hipócrita y diré que no estoy a favor, pero tampoco estoy en contra, ustedes dirán ¿pero como se puede ser tan ambiguo? Bien, en esto no entran ninguna clase de creencias, pues no las tengo, pero si el sentido común, algo que todos debiéramos tener, creo que hay veces que se debería de ser partidario del aborto, por las circunstancias que tenga el caso, pero no soy partidario de hacerlo sin mas ni mas.
Si una hija mía llegase a casa embarazada con 13 años, ¡por supuesto que abortaría! aun en contra de su voluntad, pues creo que es deber de padres, primero intentar explicar a nuestros hijos (pues todos fuimos jóvenes) que hay mil métodos para no tener que llegar a abortar, pero si pese a toda nuestra educación llegase a pasar, ¿Cómo podemos permitir arruinar, no una, sino dos vidas? ¿O acaso es mejor dejarlos a su libre albedrío?
Por ello pienso que no es tan sólo un si o un no a una ley discutible, sino que hay formas de compaginar, que primero deben de dar por echo que un menor de edad esta preparado sin más, para poder elegir por si mismos, cuando aun no están ni tan siquiera preparados para cuidarse de si mismos.
Aborto, ¡si!, pero no de cualquier manera.
Educación y preparación para la vida, ¡si! Siempre es lo mejor.
Valores, ¡Si! Pues son la mejor forma de preparación para la persona.

lunes, 8 de junio de 2009




Lunes 8- Junio

Hoy ya sé sabe como quedo definida la votación Europea, como asciende el Centro Derecha en detrimento del Socialismo, un pequeño varapalo para estos, pero a mi lo que me interesa es una de las propuestas que han llegado hasta nosotros, la posibilidad de trabajar 65 horas semanales si se llegaba a acuerdo entre empresarios y trabajadores, y con ello el aumento de la edad de jubilación.
¡Vaya! ¿Nos estarán contando un cuento?
Tantos y tantos años perdidos batallando por lograr un horario justo para el trabajador, tanta lucha –no sindical- sino de los propios trabajadores en años pasados, de repente no valen para nada.
¿Y que me dicen de la edad de jubilación? ¿Van a contemplar oficio por oficio? Porque claro, no es lo mismo un empleado de banca, o un catedrático, o un economista, que un marinero, o un encofrador o bien un minero, aunque seguro que todos estos políticos no tienen ni idea del trabajo que desarrollan cada uno de ellos, aunque si mirasen en realidad a su alrededor – no en el ministerio, ni en su ambiente – sino a pie de calle, otro gallo nos cantaría a los ciudadanos de a pie.
Espero que pese a la bajísima cuota de participación en las elecciones, salga alguna persona decente que luche por la justicia social, aunque la pena sea que los que tenemos la sartén por el mango con nuestra participación, nos dejemos arrastrar por la apatía del no voto.

jueves, 4 de junio de 2009




El Padre Ángel.

Hoy estuve leyendo una entrevista que le hicieron al padre Ángel (Mieres, 1937) que es presidente de Mensajeros por la Paz, y en verdad que es una persona excepcional, por lo que hace, por como lo hace, por lo que dice, y por su forma honesta de decirlo.
Creo que todos los demás debiéramos aprender de él, su forma de comprometerse con el más débil, seguro que tendrá defectos como todos nosotros, seguro que en muchas cosas andará equivocado, seguro que no compartiremos con él muchas de sus opiniones, pero nadie dudará de su involucración con los desfavorecidos, con los que menos tienen, con los enfermos, con los necesitados de amor, y eso es algo que tan sólo los grandes hombres llegan a tener, tolerancia… misericordia… ¡amor!
Admiro profundamente a este hombre, de la misma manera que admire a la Madre Teresa de Calcuta, o al Papa Juan Pablo II, y envidio su forma altruista de ser, porque sé que yo jamás seré de esa manera, pues aun queriéndolo, no sería capaz a llevarlo a cabo.
¡Dios le bendiga Padre!

martes, 26 de mayo de 2009



LIGA DE CAMPEONES

Hoy le voy a dedicar a este post, al evento que nos espera mañana miércoles día 27, en Roma, ¿Qué cual…?
Pues claro, la final de la Copa de Europa de Futbol, entre el Manchester y el Barcelona, que copará la atención de todo el mundo, olvidando por unas horas, el resto de problemas sociales y económicos que suceden por todos lados.
Aunque a mi también me gusta el futbol, me desquicia sobremanera la atención publica que se le da, intentando tapar los ojos de todos aquellos que se dejan engañar durante unos instantes, tal me recuerda lo que hacían los emperadores romanos con el pueblo, cuando queriendo tapar lo que sucedía, les otorgaba los juegos, y de esa manera los tenia contentos.
Yo, por supuesto que veré el partido, por cierto, iré con el Manchester, pero tendré además otros temas de conversación aparte de eso, e intentare que no nublen mis ojos con un partido.

miércoles, 20 de mayo de 2009


Políticamente me defino como Liberal del Centro, ustedes se preguntaran ¿que es eso? ¿Existe tal posibilidad?, bien, yo les diré que sí, soy alguien que creo que todos, absolutamente todos los partidos políticos tienen cosas buenas en sus bases, y que tienen cosas malas también, desde los partidos nacionalistas, pasando por los de izquierdas, hasta los de derecha, todos ellos son o están compuestos por gente como tu y como yo, humanos que a veces nos equivocamos, que erramos en nuestras apreciaciones, pero que actuamos conforme creemos.
Por ello no puedo entender como es posible que los máximos dirigentes de nuestro país, no piensen en esos millones de votantes que les otorgan el poder, sino tan sólo en mantener oscuras y nefastas diatribas unos en contra de otros.
Vamos a ver, si yo sé que cierta medida legal que estoy tomando (una ley) no es bien recibida por la mayoría de los componentes (el pueblo) de la nación, ¿por qué, pese a ello sigue adelante? ¿Por qué cuando sé positivamente que cierta cosa que la oposición dice, es necesaria para el bien común, tan sólo no la acepto, por venir de ella?
¿Por qué no un partido creado con los mejores de los demás partidos? ¿O acaso no tenéis amigos, o familiares, que son o tienen diferente forma de opinar de política que vosotros?
Yo tengo amigos radicales, nacionalistas, de derechas y de izquierdas, y son tan humanos como yo, a veces tan equivocados como yo mismo, pero no por ello reniego del bien común, para tan sólo llevarles la contraria, lo mismo hacen ellos con los demás.
Por eso creo que deberían los dirigentes, mostrar el mismo respeto al contrario, y así harían que nosotros tuviéramos una favorable opinión, y no tan sólo una opinión políticamente correcta.